Dazai Osamu observó atentamente a esa mujer frente a él, quería gruñir, gritar, sonreír, llorar y abrazarla, todo a la vez. Mientras tanto, la mujer pelirroja se acercaba a una velocidad extrema hacía el trío, bueno, hacia el castaño del grupo. Un brillo destellante reflejando sus hermosos ojos zafiro.All Rights Reserved
1 part