Un amor distorsionado: la obsesión posesiva de Mario

Mario y Luigi siempre habían sido inseparables. Lucharon juntos en innumerables batallas, salvaron el Reino Champiñón y lograron hazañas extraordinarias uno al lado del otro. A medida que los hermanos crecieron, su vínculo se profundizó en algo más profundo: un amor que trascendía los lazos familiares.

En las noches tranquilas que pasaba en el Reino Champiñón, los sentimientos de Mario por Luigi comenzaron a cambiar. Anhelaba algo más allá de la amistad, momentos tiernos que superaran sus aventuras. Pero en lugar de abrazar estas emociones con una sensación de calidez, el enamoramiento de Mario se convirtió en una obsesión enfermiza.