Louis odia tanto a Harry, odia que sea tan precioso, tan expresivo, orgulloso, terco, delicado y afeminado. Como una rosa. Pero lo que más odia de él es que... él si es libre. Harry odia tanto a Louis, odia que sea tan hermoso, tan rudo, tan despreocupado, que no tenga culpa de sus acciones. Como una daga. Pero lo que más odia de él es que... él sí es respetado. Se odian, pero del odio al amor hay solo un paso, una línea que cruzar y la tensión podría romperse de la mejor manera. Por eso odiar no tiene la misma definición para Harry y Louis.