Seis libros publicados.
Cuatro Best Sellers.
Autora del año dos veces consecutivas.
Muchos misterios, eso es lo único que se sabe de la famosa escritora de novelas juveniles Pandora, no se sabe su nombre real, edad, género o aspecto, los misterios son parte del atractivo de esta figura, sus obras son tristes y te atrapan desde la primera línea, mucho podrían decir que la conocen solo leyendo sus obras, pero.... ¿realmente es así?
La vida de Pandora era un infierno, en su casa era ignorada por sus padres, en el colegio recibía burlas y agresiones que solo parecían importarle a sus dos hermanas mayores, pero en ocasiones esta preocupación las lleva a ellas a problemas, por ello Pandora comenzó a refugiarse en la escritura y en los libros, teniendo solo 15 años se anima a publicar en línea una obra, recibiendo más atención de la que jamás pudo pensar que tendría.
Muchos años después, sigue escribiendo ya no tanto para escapar de su realidad si no porque ahora realmente le gusta...pero su identidad sigue siendo una incógnita, solo saben quien es pocas personas, sus hermanas Juno y Ceres, los únicos apoyos en su vida, están entre esas personas.
No concede entrevistas, no hace quedadas con fans, no va a lecturas o hace algún evento de publicación, no se presta para hacer nada que pueda revelar su identidad y eso a su editor no le gusta.
Eros Ruiz empezó desde muy joven a trabajar en la editorial Nube, y uno de sus primeros proyectos en solitario fue el de intentar convencer a una escritora de salir del anonimato. No tenía mucho por donde empezar solo un manuscrito y un nombre: Pandora.
Estás dispuesto a entrar en esté mundo donde no todo es bueno, pero lo último que quedará será la esperanza,
¿Estás dispuesto a abrir la caja de Pandora?
Las votaciones del año 2036 son algo que no me emociona, ya que los candidatos, a mi parecer, no valen la pena, en especial Alejandro Villanueva, aquel chico que se burlaba de mí por mi sobrepeso y al que ahuyenté cuando decidí defenderme. Mi encuentro con él y mi comentario imprudente en la fila para votar es el inicio de una propuesta que no puedo rechazar, así como tampoco puedo negar la profunda atracción y el inmenso deseo entre los dos.
De la noche a la mañana me he vuelto la futura dama y también he descubierto que soy la obsesión del presidente.