Cuando vives en una sociedad dominada por las regarlas y el decoro... muchas veces pierdes la esperanza. La esperanza de encontrar un amor sincero y bueno. La esperanza de que te quieran por lo que eres por dentro y no por que eres la mejor oportunidad. Porque en realidad no la eres. Así nuestra chica llega a sus 26 años. Siendo declarada una solterona, solo pide tener un beso, eso la lleva a tener la mejor experiencia de su vida con el chico menos pensado, el hermano de su ex mejor amigo y ahora peor enemigo. Quien parece darse cuenta demasiado tarde de lo que pudo ser y ya no podrá ser jamás.