A veces la vida puede cambiarte en cuestión de meses, semanas o días. A veces la vida podría considerarse una montaña rusa, que te hace estar a veces en lo más alto de ella haciéndote sentir repleto de felicidad y otras veces se queda estancada en la parte más baja haciéndote sentir lo peor posible. Se podría decir que mi vida, como buena adolescente que soy se basa en algo así, una montaña rusa de experiencias, emociones y sentimientos. Todo esto cambió cuando se produjo uno de los cambios que más me marcaron y conocí a esa persona, que logró que mi montaña rusa personal siguiera una linea continua, y creyera en que la vida puede ser maravillosa.