Animaladas

Todo comenzó con la forja de los nueve libros.

Uno fue regalado a los reyes de Villa Bigotes, gatos alocados y gordos como Lady Lyla y Husk.
Un segundo viajó hasta Tropical Park, y un tiburón detective lo encontró.
Otro, el tercero, fue obsequiado a las nubes, donde las lagartijas de la guarda, en su islote, lo recibieron entre alabanzas.
El cuarto, para el Ternero, donde una vaca triste lo rechazó.
Cinco fueron ya cuando se lanzó otro libro al espacio, a la nave Miss Cometas encargada de llevarlo a Adunas'Penas.

Cuatro se perdieron en la inmensidad, aguardando su momento de protagonismo.

Pero un libro se escribió en secreto...
Desde su lúgubre morada, el señor oscuro DeLutor forjó con sus tentáculos, bajo el proyecto llamado VR writers, un décimo libro en el que colaborar con los lectores y fans de la saga Leyendas de Animalia.
En él, descargó todo su humor y su buen hacer, sus ilusiones e imaginación desbordante.
Un libro... Para conquistarlos a todos.

Mucho se decidió en la Gran Batalla de Animalia.
Pero el libro abandonó a su señor DeLutor para acabar en las patas de la criatura menos pensada... Un cuervo, llamado Vade Gotico.
Raudo, se lo llevó a los únicos autores capaces de manejar su contenido en la universidad UNPICO.

Así fue como el destino de las carcajadas de longevidad antinatural de muchísimos lectores comenzó a fraguarse.

Pronto, la obra titulada 'Animaladas', habría de decidir si el radiante humor iluminaría la creciente sombra que se ceñía sobre la realidad.