Emma Morgan llega sola a Outer Banks, escapando de un pasado que prefiere dejar enterrado. Sin familia, sin amigos y con un motel como única casa, su única prioridad es empezar de cero. Pero en un lugar donde las divisiones entre Kooks y Pogues son ley, ella se encuentra atrapada en una guerra que ni siquiera entiende. Desde el momento en que cruza caminos con Rafe Cameron, todo se vuelve más complicado. Él la subestima, la provoca y la hace enojar como nadie más... y la sensación es mutua. Emma no está dispuesta a dejarse pisotear por un chico rico con delirios de superioridad, pero lo que comienza como un choque de personalidades se convierte en algo más peligroso. Porque el odio puede ser un fuego incontrolable, y cuanto más arde, más difícil es apagarlo. En el otro extremo de la isla, JJ Maybank, Kiara Carrera, Pope Heyward, John B Routledge, Sarah Cameron y Cleo le muestran que tal vez aún hay espacio para la lealtad y la amistad en su vida. Y aunque Outer Banks debería ser solo un nuevo capítulo, pronto se da cuenta de que este lugar tiene un imán para el caos... y ella no es la excepción. Con peleas en fiestas de Kooks, secretos enterrados en la arena y un destino que parece empeñado en cruzar su camino con el de Rafe una y otra vez, Emma se verá obligada a decidir quién es en realidad. Porque en Outer Banks, no hay término medio: o luchas por sobrevivir, o te hundes. Un enemies-to-lovers lleno de tensión, conflicto y un amor que jamás debería haber ocurrido.