Año 2003. Edurne es una chica alocada rodeada de amigos. Es la chica popular, divertida y despreocupada, hasta que en una fiesta comete el mayor error y nada vuelve a ser como antes.
Naim es un chico soñador y emprendedor, seguro de lograr sus sueños, con una familia que lo ama con locura, hasta que un día todo eso cambia y nada vuelve a ser como antes.
Él sabe que quiere ser poeta, pero no puede. Ella sabe que puede ser lo que quiera, pero no sabe qué hacer con su vida. Los padres de él lo quieren con locura, pero puede perderlos en cualquier momento. Los padres de ella siempre estarán ahí, pero no para quererla.
¿Podrán dos personas tan distintas, de mundos tan distintos, permanecer unidos?, ¿podrán dos personas con tantas preocupaciones permanecer unidas sin guardar secretos y mentiras?
Tal vez, lo único que necesitan para saber que se aman es un inesperado final.
Al defender a su familia de un asaltante y morir, Alicia es transmigrada a un mundo del matriarcado, donde las mujeres son el pilar y las que mantienen a la familia, mientras los hombres son los que se quedan en casa.
Lo más sorprendente para Alicia no es el sistema en el que se rige la sociedad, los hombres, que no solo son los que dan a luz, si no, que se dividen en dos.
Los oro, la clase baja que tienen tendencia a dar a luz a otros hombres.
Y los jade, la clase alta que tienen tendencia a dar a luz a mujeres.
No solo eso si no que al ser las mujeres un bajo porcentaje, las familias se conforman por un harem de hombres, los cuales no son vistos más que como máquinas de hacer bebés.
La imagen la saque de internet créditos de la imagen a: "Alya".