Corrí hacia la puerta después de escuchar sus palabras y procesarlo todo: mi cabeza dolía, al igual que mi cuello, y toqué la manija. Justo en ese momento él tomó mi mano fuertemente y me miró lamentándose. "Draven, no lo hagas, por favor." Suplicó con sus ojos llorosos. "Sabes que te amo, lamento todo lo que pasó, ¿Acaso no lo ves? ¡Fue un error, Draven!" Continuó ahora sollozando. Mi mirada estaba puesta en él mientras mi cuerpo parecía a punto de rendirse, y dejé salir algunas lágrimas. "Prometiste jamás hacerme daño, Natrix... Y ahora lo hiciste." Hablé en voz baja mirando sus lágrimas caer por sus mejillas. "Creo que todo este tiempo he estado besando a un tonto, lo lamento." Continué dejando que su mano se deslizara por la mía, y mirando su rostro devastado. Detestaba verlo de este modo, pero si no lo dejaba ahora... Si no lo dejaba ahora... Por Eevna... No puedo permitirlo. Su mano tomó mi mejilla, y dejé mi cuerpo fluír hacia el suyo, para volver a besarlo apasionadamente mientras nuestras mejillas sonrojadas se mezclaban con nuestras lágrimas de amor y tristeza. Historia ambientada en Lirdak, un mundo paralelo jamás dado a la luz hasta ahora. 2023.