Dylan vuelve a Plaza Cerro, su ciudad natal, pero al hacerlo se encuentra con una criatura cambia formas que se ve exactamente como él. Por otro lado en Buenos Aires Liz intenta ayudar lo más que puede con la cura para la maldición que poseen. Él no sabe si llamar a Liz para pedir ayuda o lidiar con la criatura por si solo, solo sabe que no importa lo que haga, será una horrible decición.