Tea, coffee and egoists | Blue Lock

--Shidō Ryusei-kun --reconoció ella, alzando las cejas.

El mencionado ladeó la cabeza y mostró una sonrisa maliciosa que iba ensanchándose según ella lo iba inspeccionando de arriba abajo con la mirada.

--La última vez que lo revisé --dijo la fémina, entrecerrando los ojos--, eras tú quién me enviaba gente aquí, no quién venía de la nada --cruzó las piernas y los brazos con lentitud, siendo plenamente consciente de los ojos que seguían sus movimientos--. A simple vista, no pareces tener ningún dolor, así que, Shidō-kun, ¿Por qué razón has venido a mi enfermería?

La sonrisa del futbolista se estiró aún más, parecía plenamente complacido. Miyu solo alzó el mentón, esperando una respuesta que no tardó en llegar.

--Ahora entiendo la razón por la que ese chico salió corriendo para venir aquí, me dan ganas de lesionarme para que me atiendas.

...

Se pellizcó el ceño y suspiró.

--Nagi-kun, te recuerdo que tienes una habitación. Deja la enfermería para los pacientes.

...

--No puedes obligarme.

La rubia se movió hacia él, con una sonrisa divertida jugando en sus labios y su portapapeles en la mano.

--¿Sabes? Eso fue de las primeras cosas que pregunté cuando me ofrecieron trabajar aquí, Itoshi-kun --dijo ella, acercándose a la puerta y tocando el icono del candado con el índice--. Adivina cuál fue la respuesta.

...

--Entre todos los chicos de Blue Lock, ¿cuál es tu favorito, Miyu-chan? --dijo el chico, mirándola a los ojos.

Ella ni se inmutó ante su pregunta. Ya se había acostumbrado al coqueteo y las insinuaciones del delantero. Antes le molestaban un poco, ahora decidió seguirle el juego.

--Ese sería Bachira-kun, un chico de otro edificio. ¿Contento con la respuesta, Otoya-kun?

El albino suspiró, con dramatismo.

--Eres una mujer cruel.

...

En el que Anri decide poner a una enfermera en Blue Lock para atender a los internos y la estudiante universitaria llamada Teieri Miyu decide aprovechar la oportunid