Story cover for Carta a mi yo de pequeña  by danna_lys
Carta a mi yo de pequeña
  • WpView
    Reads 2
  • WpVote
    Votes 1
  • WpPart
    Parts 1
  • WpView
    Reads 2
  • WpVote
    Votes 1
  • WpPart
    Parts 1
Ongoing, First published Aug 23, 2023
Solo... te pido perdón
All Rights Reserved
Table of contents
Sign up to add Carta a mi yo de pequeña to your library and receive updates
or
#462niñez
Content Guidelines
You may also like
No puedo amar correctamente by Valeriepriscilla
21 parts Ongoing
Este poemario... es mi refugio y mi cicatriz. No es que lo signifique mucho para mí; es que, de alguna manera, soy yo a través de sus páginas. ​Recuerdo la crudeza de mis 18 años. La vida se sentía inmensa, y mi corazón, recién estrenado en el dolor, parecía demasiado frágil para sostenerla. Estaba roto, sí, pero no era solo la pérdida lo que me dolía; era la culpa que me ardía por dentro, la sensación de que yo había fallado en la ecuación. ​Y en medio de ese desorden emocional, encontré la frase que no sabía que estaba gritando: ​"No puedo amar correctamente." ​No fue una línea leída en un verso ajeno, fue una traducción exacta de mi alma. Era el diálogo más honesto y cruel que podía tener conmigo misma. Me miraba en el espejo, con los ojos hinchados y el nudo en la garganta, y esa era la única verdad que podía articular. ​Era la admisión de que mis sentimientos eran demasiado grandes, demasiado caóticos, o quizás demasiado poco para encajar en lo que se suponía que debía ser el amor. ​Era sentir que existía un patrón de costura para querer, y que yo solo tenía tijeras desafiladas y manos temblorosas. Que mi forma de entregarme siempre terminaría en desastre. ​Esa frase era mi sentencia y mi liberación a la vez. Al verbalizar que no sabía cómo "amar correctamente", asumía mi imperfección y, en el fondo, me daba permiso para sentirme destrozada. ​Hoy, cuando abro esas páginas, no siento la pena de antes, sino una profunda ternura por esa joven de 18 años. El poemario se ha convertido en el testigo mudo de que la supervivencia es posible. Me recuerda que la única forma correcta de amar es mi propia forma, incluso si eso significa equivocarse mil veces. ​Este libro no solo me acompañó en la ruptura, sino que me enseñó que el diálogo más importante es siempre el que tenemos con nosotros mismos. Y por eso, lo guardo como el mapa de mi primer gran rescate.
You may also like
Slide 1 of 10
No puedo amar correctamente cover
El Espejo cover
Fuera de cámaras-Mernetti cover
Desfibrilador (✔️) en librerías. cover
Alma , mente y corazón  cover
Los Pedazos de Antes (Cartas sin Destino) cover
Valentía (Disponible en Amazon) cover
Valentía II cover
Frases de Este Dolor No Es Mío cover
Galletitas de lodo  cover

No puedo amar correctamente

21 parts Ongoing

Este poemario... es mi refugio y mi cicatriz. No es que lo signifique mucho para mí; es que, de alguna manera, soy yo a través de sus páginas. ​Recuerdo la crudeza de mis 18 años. La vida se sentía inmensa, y mi corazón, recién estrenado en el dolor, parecía demasiado frágil para sostenerla. Estaba roto, sí, pero no era solo la pérdida lo que me dolía; era la culpa que me ardía por dentro, la sensación de que yo había fallado en la ecuación. ​Y en medio de ese desorden emocional, encontré la frase que no sabía que estaba gritando: ​"No puedo amar correctamente." ​No fue una línea leída en un verso ajeno, fue una traducción exacta de mi alma. Era el diálogo más honesto y cruel que podía tener conmigo misma. Me miraba en el espejo, con los ojos hinchados y el nudo en la garganta, y esa era la única verdad que podía articular. ​Era la admisión de que mis sentimientos eran demasiado grandes, demasiado caóticos, o quizás demasiado poco para encajar en lo que se suponía que debía ser el amor. ​Era sentir que existía un patrón de costura para querer, y que yo solo tenía tijeras desafiladas y manos temblorosas. Que mi forma de entregarme siempre terminaría en desastre. ​Esa frase era mi sentencia y mi liberación a la vez. Al verbalizar que no sabía cómo "amar correctamente", asumía mi imperfección y, en el fondo, me daba permiso para sentirme destrozada. ​Hoy, cuando abro esas páginas, no siento la pena de antes, sino una profunda ternura por esa joven de 18 años. El poemario se ha convertido en el testigo mudo de que la supervivencia es posible. Me recuerda que la única forma correcta de amar es mi propia forma, incluso si eso significa equivocarse mil veces. ​Este libro no solo me acompañó en la ruptura, sino que me enseñó que el diálogo más importante es siempre el que tenemos con nosotros mismos. Y por eso, lo guardo como el mapa de mi primer gran rescate.