Dedicado al chico que me hace sentir tan especial y muy amada. Él siendo un ángel caído del cielo un amor. Aunque la vida haya sido dura con mi niño porque lo que quiero es hacerle feliz, verle esa tierna sonrisa que tiene en su carita, aquellas orbes cholatejas que me enamoran e hipnotizan cada que las veo. Ese rostro con unas bellas facciones me encantan, una manos grande que pueden cubrir las mías como si nada. Una calidez que me recorre cuando estamos juntos de la manera más hermosa, sin importar el lugar con su presencia hace que todo sea romántico. El dulce más delicioso que probé y que no se acabe, como si yo fuera drogadicto y él mi estupefaciente.