Haniel, nunca a sido alguien muy expectacular, con una vida modesta, solo se tiene a ella, su trabajo como mesera, su mejor amiga Paige y su padre adoptivo Richard, siempre bailando entre la universidad y el trabajo, la vida de Haniel no podría ser más monótona, pero ella tiene algo especial. Desde que era una niña, Haniel puede ver espectros. No es que quiera hacerlo, pero nació con ese don qué ella siempre ha negado. Todo en su vida era aburridamente triste y normal hasta que un día todo eso cambia. Después de presenciar algo que no es de este mundo Haniel comienza a cuestionarse si todo realmente era su imaginación o si realmente existe algo más allá de todo lo que vemos. Es hasta que lo conoce a el que todas sus dudas se esfuman. Gabriel, el misterioso chico que vaga por las calles de New York, tan guapo como misterioso e intrigante, el chico esconde más secretos de los que ella está por descubrir. Arcángeles. Demonios. Un objeto perdido. Y la lucha por evitar una guerra entre el cielo y el infierno qué llevara el Apocalipsis al mundo humano.