Si hubiese sabido que al volver a la ciudad de Inazuma volvería a los mismos problemas que cuando era una adolescente, me habría pensado dos veces mi regreso; Pero como siempre, mi hermano Mark me lió para que me quedase, para que le ayudase a salvar al fútbol y para que le ayudase a recuperarle a él. A la persona que nos abandonó hace tres años, a ese hombre al cual vi una mañana hacer una maleta y largarse, dejándome con miles de dudas, entre ellas, qué haría yo sola con un hijo de cuatro años y embarazada.