"Sentía que las paredes se cerraban a mi alrededor, y los ojos de las pinturas en el pasillo, que en otro tiempo admiré, se burlaban de mí por haber creído en él y por haber caído en aquello de lo que siempre huí. Sus palabras resonaban sin cesar, como un eco interminable en mi mente. Quería ser fuerte, contener mi dolor como lo había hecho antes, pero ya estaba perdida. Mi corazón se había entregado por completo a él." "No sé permiten copias ni adaptaciones" Historia resguardada legalmente.