❝I want your love, and I want your revenge❞ -Lady Gaga, Poker Face.
Lord Kian Aitken, un astuto pero empobrecido vizconde, tiene un solo propósito en mente: vengarse de lord Fabien Moncrief, quien deshonró lo que para él era más sagrado, y destruirlo hasta que nada quede de él. Y encuentra una oportunidad de oro cuando un escándalo repentino a cerca de él llega a sus oídos.
Lord Tobias Moncrief -o, más bien, tras su divorcio, lord Tobias Crimshaw- ha visto mejores tiempos que este. Tras el doloroso descubrimiento de la infidelidad de su esposo y su mediática separación, se ha convertido en el foco de las burlas y la lástima ajenas. La única forma aceptada por la sociedad de huir de la vergüenza que el divorcio le ha causado es, naturalmente, volver a casarse, pero con treinta y dos años y un hijo de su anterior matrimonio, no es favorable que alguien vuelva a tomar su mano jamás. Eso cree, hasta que un atractivo y misterioso vizconde le ofrece una propuesta a la que no podrá decir que no.
Un matrimonio de apariencias les daría lo que necesitan; a Kian, una venganza contra su peor enemigo y tierras que manejar, y a Tobias, una vida tranquila y la seguridad de un Alfa. No se necesitan más que para eso... Pero la pasión y la venganza parecen ser dos caras de la misma moneda, y ambos saben que la suya ha caído en el lado de la primera.
Primer libro de la saga "House of Crimshaw".
En un mundo donde las llamas danzan sobre dragones y destinos entrelazados, Lucerys Velaryon, un omega de fuego, carga con la marca de haber arrebatado el ojo de Aemond Targaryen, su esposo alfa. En la encrucijada del deber como futuro señor de las mareas, Lucerys enfrenta el odio abrasador de su esposo y la sombra de ser un omega defectuoso.
En este viaje, teje su destino entre las llamas del autodesprecio y la búsqueda desesperada de amor propio. Mientras lucha por encontrar la redención en los ojos de Aemond, su esposo resentido, yace el desafío de cultivar el amor hacia los futuros herederos que llevarán consigo la carga de su legado.
Entre las calamidades, Lucerys se aventura a través del ardor de las relaciones personales y las llamas de la autenticidad, buscando una conexión que trascienda las cicatrices y las diferencias. En este relato, el fuego no solo quema en el exterior, sino que se convierte en el crisol donde se forja un amor que perdure a través de las generaciones venideras.