Nunca penso que a alguien le importaría una sirvienta como ella, todos los días Lethia siempre hacia su mejor esfuerzo pero el faraón y los demás siempre la veían como una inútil y haci fue como ella se veía hasta que un día conoció al dios del desierto, el caos y la violencia Seth. Ambos cambiarían la vida del otro de una manera que nadie podría imaginar.