En los horizontes del norte, el cosmos brilló una vez en la sangrienta guerra de mil años entre el cielo y el infierno que tiñó las tierras de color divino y demoníaco. Los llamados "Herederos de los Cielos" heredaron la herencia de la Deidad, mientras que, por otro lado, los llamados "Herederos Malévolos" fueron exterminados por su presencia malévola y horrible. Pero en la actualidad, el hijo menor de la familia Hyoudou, Hyoodou Issei, heredó la "Herencia Maquiavélica", conocida como el "Corazón del Demonio Primordial", El único demonio capaz de devorar los orígenes de Dios, Diablo.