-Entonces...¿ese es el precio?- la voz algo ansiosa de aquel rubio retumbó por la habitación silenciosa y oscura de aquel departamento tan mal acondicionado- -Si... come una comida entera, y entonces tu y yo seremos novios- el de cabellos negros enunció con su voz ronca, esto ocasionó que los ojos del rubio se abrieran completamente con asombro y sus mejillas se pinatarn de un rojo carmesí,que resaltaba mucho por su test completamente blanca - ambos se miraban mutuamente, sin decir nada más que ello, analizando si le convenía a cada uno estar en esa situación, ¿Qué beneficios tendría?.