Su muerte había sido inesperada, Maegor tenía tantos planes en mente que apenas podía concentrarse en uno, su único objetivo era evitar que su casa fuera a la ruina y no solo fallo sino que las siguientes generaciones Targaryen eran una vergüenza para aquellos que llevaban sangre Valyria. Tenía una nueva oportunidad para salvar su casa y está vez no fallaría sin importar lo que le costará.