Despedirse nunca es fácil, y no saber si estás diciendo adiós para siempre o si existirá un reencuentro futuro es el factor que lo complica todo aún más.
Resulta que cuando no encontramos manera de expresarnos o de hallar una solución a una incógnita o un problema, simplemente explotamos internamente y nuestra reacción externa es gritar desenfrenadamente en busca de qué alguien nos escuche y nos entienda.
Desafortunadamente no siempre somos escuchados y nos toca ahogarnos internamente con nuestros pesares y problemas.
Yo soy un ejemplo de ello.
Por eso es que estoy gritando, para hacerme sentir mejor, porque los adioses cuestan, porque no entiendo las vueltas que da la vida, porque necesito ser escuchado y necesito aún más que alguien me ayude.
A eso dedico estos 30 gritos, a la espera interminable de que mi voz se haga presente en su vida y que antes que todo termine, por última vez ella me escuche.
Gi-hun (pasivo)
In-ho(activo)
Puede presentar contenido "lemon"
Acorde a personas mayores de +18!
Muchas gracias por el apoyo!! 💗💗
También presento un grupo en Whatsapp por si quieres unirte, puedes escribirme por mi tablero del perfil, y yo te responderé!