La última canción I Yovana Pérez

Todo y nada, al mismo tiempo, marcaron tanto que a día de hoy sigo sin poder olvidarlo.
Es como si desde ese día en mi mente ya no existiera nada más que él, como si mi cerebro se negase a olvidarle.

-¿Quién eres? ¿Y qué haces en mi casa? -Ahora quien ríe es él, pero parece ofendido.

-¿Pretendes que te crea? No puede ser que no sepas quien soy, además si eres quien yo creo debes de saberlo mejor que nadie. Me tuviste a escasos centímetros, así. -Da dos pasos hacia mí y su colonia inunda mis fosas nasales, su olor...es embriagador y seductor.

Él no parece estar nervioso, mientras que yo parezco pura gelatina. ¿Qué hace aquí? Tendría que estar en Alicante para el concierto de ésta noche. ¿Cómo sabe donde vivo? ¿Sabe quién soy? No entiendo nada y sus miraditas pasadas de tono no colaboran, al contrario me están dando micro infartos y subidas de temperatura.

-¿Te comió la lengua el ratón o es que tienes amnesia? -Desvío la mirada y con toda la confianza del mundo me coge de la barbilla obligándome a mirarle a los ojos. Tengo el pulso a mil y siento que se me va a salir el corazón en cuestión de segundos.

Ese día el mundo ardió y con el se llevó la paz de nuestras vidas, la prensa fue testigo de nuestro encuentro y no se detuvo. "Charlie USG rompe el corazón de sus fans con éste escándalo" un titular detrás de otro, a cual más falso que el anterior.

Pasé de ser una chica desapercibida a estar en boca de todo el mundo, de no ser más que una camarera a ser la novia de Charlie USG. Nuestras familias, nuestros amigos y hasta nuestros trabajos se vieron envueltos en ésta maraña de mentiras. Y no miento cuando digo que temo el resultado final; las mentiras nunca traen nada bueno y ésta historia está repleta de ellas.

Aunque siempre nos quedará pendiente una última canción.

- Prohibido cualquier copia, edición o adaptación alguna de ésta historia.

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