LÁGRIMAS IMPROVISADAS.

Concuerdo contigo.
A veces, quiero despertar.
Y dejar de suspirar a aquello que no puedo recordar.
Solo quiero dejar a extrañar a aquello que ya no puedo amar.

Concuerdo conmigo.
A veces, las palabras interrogan.
A aquellos que traicionan.
Y viven en pecado o simplemente se ahogan.

En un estanque de desesperación.
Hecho de lagrimas improvisadas.
Hecho de emociones olvidadas.
Y soledades de desilusión.

Concuerdo con todos.
Las letras se desvanecen.
Entre atardeceres que desaparecen.
Y mueren.

Para que caiga, la oscuridad infinita.
Ingenua y algo maldita.
Contradictoria e inaudita.
Cándida noche marchita.

Que naces del sufrimiento de los inocentes.
Y de las calderas más ardientes.
Cándida noche infinita.
Que a los atardeceres marchita.

No te pido nada.
Simplemente no me explotes en la cara.
Como una cruel granada.
Nacida de una guerra antepasada.

Me despido porque concuerdo.
Con aquel recuerdo.
Que me dejaste.
Que ya paso o simplemente olvidaste.