Sí, es uno de esos cuentos que, más que cuento, es un testimonio de vida. Aunque no lo considero algo malo. A veces es bueno hablar y escribir sobre la vida. A veces, como en este caso, es una necesidad. Porque, a veces, uno tiene tanto que decir, tanto sobre lo que escribir, que las palabras no siempre son suficientes. Y este es uno de esos casos. De igual modo, querido/a lector/a, espero que disfrutes leyendo este cuento, si decides tomarte la molestia de leerlo.All Rights Reserved