Un payaso terrorífico que vive en el bosque cerca del pueblo Kento, aterroriza a los niños y adolescentes de este, pero también disfruta que corra un poco de sangre. -Mira, Zalgo, aquí esta tu comida - dice un payaso macabro mientras le daba carne a una cabra de ojos rojos y cuernos puntiagudos. El problema no era la cabra, sino lo que comía. Nadie más que vos y yo sabe sobre esta historia, la historia en que un grupo de niños sufre por adentrarse a un terreno desconocido. Estos sólo lograron perturbar la paz de Belcebozo. Ahora tienen que pagar las consecuencias.