Y yo nunca seré una persona normal. Y yo nunca podré ser normal. Nunca podré tener un trabajo estable respecto a mis cicatrices y marcas asquerosas que no son ni mucho menos ejemplo para los más pequeños. Nunca podré intentar pensar en positivo porque mi mente tiene un mecanismo de auto sabotearme y autolesionarme. Nunca lograre poder hablar como una persona normal, sin inseguridades ni miedo a que le vean sonreír. Nunca lograre ponerme a estudiar y sacarme algo... Si no me puedo sacar la E.S.O no me voy a sacar un grado medio ni de coña. Nunca podré decir abiertamente quien soy y que soy... ¡Hola! Me llamo Noah y soy un chico... Eso nunca pasara. Nunca podré tener la conciencia limpia después de todo lo que le he hecho pasar a todos, me culpo cada día, es como si me diera yo mismo con un látigo en la espalda, y por desgracia, mis manos nunca se cansan. Nunca podré no hacer las cosas de manera compulsiva porque sigo un patrón basado en: Actuó, la cago, pienso, y lo intento volver a arreglar. Nunca podré no mirarme al espejo sin repugnar al ser que estoy viendo, ese cuerpo lleno de marcas, de estrías, de grasa, me hace querer vomitar, acabarlo, deshacerlo. Nunca podré dejar atrás mi pasado. Nunca lograre ser feliz... En conclusión, nací para morir joven, no hay escapatoria.