Jinbe ya había conocido a los sombrero de paja más no se había vuelto uno, hasta ahora. Se sentía curioso por saber como era cada quien en su día a día, sin tener un ambiente de pelea o de fiesta, ya que sabía que aun existían días los cuales podían ser muy aburridos en donde nada interesante pasaba en medio del mar. Vaya que se equivocó.