Addy era una chica normal de 16 años a la que su madre le controlaba la vida. En su penúltimo año de secundaria, sufrió de Bullying a causa del color tan peculiar de sus ojos. Logro obtener una beca en un instituto en Madrid, para su último año y se mudó con sus padres cuando por fin fue aceptada; ahí nadie sabía lo de sus ojos. Sin pasado y sin bullying pudo comenzar a vivir una vida normal nuevamente. Hasta que un día al llegar a casa luego de clases, unos hombres la secuestran y la llevan a un lugar donde hay más chicos como ella, en el cual tienen que hacer ciertos entrenamientos para "desarrollar sus habilidades" Claro que Addy no lo entendía, hasta ahora...