Siempre he oído y leído lo mismo: Chica buena y correcta se enamora de un chico malo que le cambia la vida, y terminan felizmente enamorados y comen perdices y bla bla bla.
Demasiado predecible por no decir aburrido.
Pues bien, voy a contaros mi historia, y no es una historia bonita, ni nada a lo la típica que siempre habréis oído, es todo lo contrario a lo que esperáis.
Estoy harta de seguir prototipos, nunca los he seguido, ni he sido la chica perfecta, ni la hija perfecta, ni la amiga perfecta, ni la estudiante perfecta, ni la novia perfecta, ni nada que lleve "perfecta" detrás.
Y no tengo problema en admitirlo, no soy perfecta, tengo muchas imperfecciones.
Solo que a veces encuentras a alguien muy especial que ve tus imperfecciones perfectas.
"Ayer creías que el amor no existía como todos lo ven en las películas, hoy pensabas que enamorarte de Harry era lo mejor que te había pasado... y mañana seguirías deseándolo cada vez más.
A veces el enamorarte no era malo... no todo amor es lindo, ni todos son afortunados de tener a la pareja perfecta. Pero por suerte, tú tenías al amor de tu vida a tu lado, el chico que te hizo desear a él sobre todas las cosas... aquel te que hizo creer que pretendía quererte... pero no, él no pretendía amor. Realmente te amaba, y te amaba cada segundo que estuviste a su lado... cada instante, cada respiro... él estaba ahí de alguna forma."
Esta historia no es mía , todos los créditos a la autura original.