Ambos se conocieron en una pequeña fiesta íntima entre unos cuantos pilotos, en la habitación de uno de ellos, después del Gran Premio de Arabia Saudita. Desde que ella lo vió, supo al instante que era el chico de sus ojos. Esos ojos, esa sonrisa, esas manos, esos labios... todo de él le llamaba la atención. Él no se quedaba atrás con su pensamiento hacia ella, pero había la pequeña diferencia de que no la miraba como una posible pareja, sino como un posible rollo de una noche el cual podría llegar a durar toda la temporada si se mantenía en secreto Ambos tienen diferentes objetivos al principio de su especie de relación, pero al final ambos acaban teniendo el mismo: poder quererse sin tener que esconderse. Aunque sea duro el camino que van a tener que recorrer, van a intentar llegar a final de temporada sin tener que pedir perdón después de decir un simple "Te quiero" en público. • 3° libro de mi saga •