Tania siempre fue una jovencita alegre, inspiraba en los demás amabilidad y respeto. Joel por el contrario era típico muchacho popular y atractivo de la escuela, por azares del destino se conocían desde pequeños y eran los mejores amigos, siempre habia esa complicidad y atracción entres ellos. Ella está pasando por una etapa de su vida en la que se enfrenta a sus peores miedos y Joel es lo único con lo que puede contar en el mundo, uno en el que a cada segundo puede ser el último.