𝔜 𝔪𝔢 𝔭𝔯𝔢𝔤𝔲𝔫𝔱𝔬 ¿𝔮𝔲𝔢 𝔫𝔬𝔰 𝔭𝔞𝔰𝔬?
Estamos en un mundo ni muy grande, ni muy pequeño.
Samantha Johnson, una chica de 19 años, de Estados Unidos. Risueña, siempre se la pasa sonriendo. Con un cuerpo envidiable, tenía las piernas algo largas, por lo cuál, es alta (no tanto pero, sí) de caderas medianas, y cintura casi pequeña (es decir, ni muy pequeña, ni muy ancha).
Los padres de ella murieron cuándo tenía dieciocho, por lo qué no tenía a nadie más que a su amiga y su hermano mayor (este tiene un año más que ella), hasta después.
Luego de lo que pasó con sus padres, estarían quedándose a vivir con Olivia (la mejor amiga de Samantha), en Alemania.
Allí estaría yendo a la Universidad, en la cuál conocería al chico que le cambiaría totalmente su vida.