Las gotas caen en el piso de manera rítmica, parece como se acoplan a los movimientos de los golpes de los secuaces, tirado en el suelo recibe golpe, tras golpe, gota tras gota armonizando con las patadas y golpes que recibe.
Entra a la habitación del sótano, y pregunta:
-Ahora, vas a pagar tu deuda o no- dice el hombre de traje en cuclillas.
-Paga...ré, pagaré-
-Asi que tenias mi dinero y encima te hacias el dificil-
-No...no tengo dinero, pero pue....do ofrecerte algo mejor que ello-
-Algo mejor, eso quisiera ver- Dijo el hombre con curiosidad.
-Mi hijo..
-Mi hijo?- repetido el hombre como si fuera una broma.
-Mi hijo..señor...es un doncel...- dijo apenas modulando las costillas como cada parte de su cuerpo le dolían. - el... es un don..cel como lo fue su madre... usted sabe que estuve casado con ella... antes.. que muera, tuvimos un hijo se lo dare... pero por... favor.. dejame vivir...-
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Escucho pasos detrás de mí y corro como nunca.
-¡Déjenme! -les grito desesperada mientras me siguen.
-Tienes que quedarte aquí, Iris. ¡Perteneces a este lugar! ¡Tú no eres una humana normal! -grita un guardia sin dejar de perseguirme...
-¡No! Yo pertenezco a mi ciudad, con mis padres... -cuando estoy por llegar a la salida veo a dos chicos.
Practicando con espadas...
-¡Sky! ¡Atrápala! -grita Rick...
Uno de los chicos desvía su mirada y nuestros ojos se conectan
Sus ojos dorados me miran fijamente...
Revolotea despreocupado su cabello rubio, pero luego...
Se da cuenta de lo que sucede y me apunta con su espada
Yo me detengo inmediatamente...