Bonus y su padre viven de los ingresos de una librería que lograron levantar gracias a un préstamo que el anciano consiguió a unos prestamistas a espaldas de su hijo. Esto provocó que Bonus cruzara su vida con uno de los cobradores, llamado Bank. Ambos inician una relación profunda hasta que el ángel, como Bonus lo consideraba, se transforma en un demonio inexplicablemente.