In this modern take on Cinderella, we follow Clay, who's our Cinderella, and Grace, a savvy entrepreneur, stepping into the role of the Prince(ss). Clay's stuck with his stepdad Bob, who's not the nicest, but his sisters are his rock. Meanwhile, Grace is hustling through the ups and downs of her business world. Despite their different walks of life, Clay and Grace meet and click. But here's the twist: the traditional roles are flipped! Instead of a prince charming, it's a princess with the power. As Clay and Grace's story unfolds, we see how love knows no bounds, not even traditional gender roles. It's a tale of modern romance, where dreams are pursued, barriers are broken, and love triumphs in unexpected ways.
Asher pensaba que tenía una vida perfecta. Era el mejor en su equipo de hockey, tenía las mejores notas en la universidad y un grupo de amigos que parecían serle fiel.
Pero cuando conoce a Skye, la hermana de uno de sus mejores amigos cree que la chica está loca. Tiene una actitud tan dura que es difícil de romper y suele irritarlo todo el tiempo desde que se ha mudado a vivir con su hermano y él.
Y cuando los chicos del equipo le proponen que no conseguiría conquistar a alguien como Skye, lo ve como un reto que está dispuesto a jugar, una apuesta para conquistar el corazón de alguien como Skye es suficiente para que Asher acepte, pues es demasiado competitivo y no está dispuesto a perder su puesto en el equipo de hockey y pasarse el resto del año en la banca como le han apostado.
Sin embargo, a medida que conoce a Skye, Asher se da cuenta que la chica es todo lo contrario a lo que le ha tratado de demostrar, conquistarla no parece tan complicado como pensaba y el corazón de ella no parece ser el único en juego.