Al ser rechazado por su primer compañero no humano, Harry comienza a hundirse en la depresión solo para ser salvado por Snape, quien le permite vivir en su casa para recuperarse mientras él está enseñando. Durante este tiempo, Harry conoce gente nueva, hace nuevos amigos y nuevos enemigos, gana una mascota, se cura mientras encuentra una familia, el amor verdadero y vive una aventura.