La Insoportable levedad de ser Oso (y otros problemas de Manhattan)
48 parts Ongoing No soy Julia Roberts. Nunca lo fui.
Toda mi vida esperé -con el corazón en la mano y Pretty Woman en los auriculares- que alguien apareciera con un traje inmaculado, un ramo de flores enormes (no rosas), y la promesa de que yo era "la chica de sus sueños".
Pero no, mi ciela.
Eso no pasó. Porque nuestras vidas no pueden ser como una comedia romántica.
Y para quien se lo pregunte: esto no es una historia de redención. Ni siquiera de crimen -lo siento si rompo los corazones de todos los Hércules Poirot por ahí. Este es solo el testimonio de una chica -una de esas de espagueti en oferta, dos por veinte centavos- tratando de sobrevivir al fin del milenio... justo cuando mi exnovio -el cabrón que rompía y armaba mi corazón a placer- regresó convertido en un oso.
Literal.
De esos que parecen pesadilla barata de Coca-Cola. Y claro, justo la mañana que decidí ayudarlo. Con sus rugidos, abrió de golpe esa pequeña tacita de café donde yo había guardado todo lo que dolía. Y me dejó con una certeza brutal: que quizá la única salida... es contar mi historia antes de que la existencia me trague entera.