Como miles de personas más, Martina, debía dejar su casa, nuevamente. De Argentina a España, de nuevo a Argentina, luego Paises Bajos y Francia, de allí a España, ese fue su recorrido de vida. ¿Por qué? Su hermano, Nicolás, jugador de fútbol profesional había sido comprado por el Fútbol Club Barcelona y ella debía acompañarlo. Sus padres habían fallecido, por lo que Nicolas tenía que hacerse cargo de ella por ser menor de edad.