El pato Lucas es dueño de uno de los centros comerciales más importantes de la ciudad, obviamente obtiene grandes ganancias. También está casado con Bugs Bunny, con el cual formó una pequeña familia al adoptar a tres pequeños niños, Yakko, Wakko y Dot.
Sin embargo, al tener un negocio tan exitoso, eso contrajo problemas con el pasar del tiempo, ya que Lucas no supo equilibrar el tiempo de familia con su trabajo, ocasionando que se aleje de su esposo e hijos hasta el punto en no estar presente en casi todas las fechas importantes.
Ahora, Lucas, junto con el fantasma de la navidad pasada, observan el día en el que el conejo puso fin a su relación.