Eliza Jones y Stella Lambert son el prototipo de: "personas correctas en el momento equivocado", pues sus vidas habían coincidido en preparatoria, cuando estaban empezando a descubrir su sexualidad, pero, por cosas de la vida lo de ellas no se pudo dar.
Después de mucho tiempo tenían que volver a cruzar caminos, una de ellas lo sabía, la otra no tenia ni la más remota idea. Una de ellas creía que era el destino haciéndole una mala jugada, la otra sabía que así tenía que pasar.
Stella sabía las complicaciones que serían regresar a su antigua cuidad para estudiar la universidad, no le interesaba lo fácil o difícil que sería la universidad, solo le interesaba que ella no la odiara, aunque sabía que eso era imposible.
Eliza creía que su vida iba ser retomada, pues estaba sanando de apoco, pero al verla de nuevo en la universidad su vida se detuvo, colapso, pero se dijo a si mima que no le prestaría mucha atención, solo tenia que pasar los cuatro años sin topársela, era fácil, pues su facultad estaba mucho más lejos de la de ella, pero cuando Stella fue encargada de los equipos deportivos todo se fue al carajo, tuvo complicaciones, solo quedaba un último año, podía graduarse sin volver a caer en ella, Eliza tendría que jugar esa última partida.
Stella no se había acercado a Eliza en tres años, pero tenía que hacerlo, solo quedaba un año para que jamás volviera a verla, tenia que jugar su última partida, tenía que ganar esta vez.
⚽️Aclaraciones⚽️
Para poder leer este libro tendrías que haber leído el primero, pues este es un spin-off de "Un juego a la vez"
Si quieres leerlo sin haber leído el otro estás en todo tu derecho, pero solo lo digo para que no te hagas spoilers o no entiendas algo de la trama😊.
Hannah habia leido mucho para saber que esas historias de amor que vendian las novelas no eran mas que clichés, a sus 20 años, solo se había enamorado una vez
y vaya que no quedo con deseos de volver a repetir la experiencia, no era un chica fea al contrario era muy bella pero ella realmente no creía en la belleza física siempre había pensado que era algo pasajero era mejor preocuparse por la belleza del alma. No habia tenido acertadas relaciones amorosas, pero después de tanto tiempo se sentía atraida por un chico de la universidad, El siempre estaba sentado bajo ese árbol escribiendo algo en su cuaderno.
Ian un chico muy apuesto y muy inteligente
no creia mucho en las historias de amor debido a sus relaciones pasadas nunca habian terminado bien. El no era del tipo de chico que tiene un chica solo para tener sexo por placer, a el le interesaba mas que eso de una chica para tener una relacion, sin embargo habia algo en Ella, la chica que siempre estaba leyendo un libro diferente.