Existe una maldición por estos lares: cuando caiga la séptima cabeza de la palmera que se alza en el malecón, al pueblo se lo tragarán la tierra y el mar.
Alba, la hija de la bruja que lanzó este hechizo, lleva 300 años intentando descifrar como detener la catástrofe y limpiar el nombre de su familia, aunque no ha tenido mucho éxito. Y con la última cabeza apenas en pie, no tiene otra opción que salir de su cómodo cementerio y volver con los mortales.
Oscar, el aprendiz de la Muerte, lleva los mismos 300 años organizando archivos en el Más Allá. Acaba de ser nombrado heredero de su maestro y las entidades cósmicas le han puesto a prueba para demostrar que es un digno sucesor (lo que él mismo pone en duda). La única regla es que no debe tener interacción con los vivos.
El Amor y la Muerte son curiosos, les gusta jugar, y cuando hagan que los caminos de los jovencitos se crucen, serán ellos los encargados de salvar al pueblo no solo de maldiciones y fantasmas, quizás también otros monstruos que se esconden a plena vista.
Y puede que en el proceso una chispa mágica se encienda entre ambos.
Una historia de época, con hechicería, aventura y amor.