Aquí Se Acaba El Mundo

¿Alguna vez has oído la frase, "en la ignorancia está la felicidad"? Quizás no era un mundo perfecto... había guerras, hambrunas, pobreza, violencia... pero comparado con lo que vino después era, de alguna manera retorcida, feliz...

Porque los que nos mantenían ignorantes fallaron. No podían protegernos, no eternamente. Algún día tenía que suceder, tras siglos y siglos, donde el fin justificó sus medios, donde la perversión humana brillo sombríamente como nunca antes.

Ahora nada puede salvarnos. El mundo entero, nuestra historia, acaba aquí. Es su culpa. Y ahora todos pagaremos las consecuencias.

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A veces Ezequiel no desearía estar aquí, pero es lo que le toca. Los fantasmas de su pasado lo han perseguido los últimos treinta años de su vida, haciendo hasta lo imposible por arrastrarlo hacia el infierno... y finalmente, lo han logrado. Junto a todos los que ama, lo que le queda. El mundo entero y la humanidad se esfuman cuando menos preparado está, cuando más debe hacerse fuerte y proteger a los que les importan, o morir en el intento.

Criaturas que corretean en la oscuridad, que aparecen cuando cae la noche. Hombres extraños que quieren matarlos. Personas que están, y después no. Un apocalipsis no vaticinado en la biblia, ni en ninguna de las profecías...

En la peor de todas las pesadillas, una guerra no declarada frente a los peores enemigos, contra los más aterradores monstruos y los demonios jamás invocados, él y otros harán lo posible por sobrevivir en el Nuevo Mundo, donde estar vivo resulta ser incluso peor que estar muerto, donde no existen los amigos, mucho menos los "buenos".

La crueldad más profunda del ser humano se desata de sus cadenas en un mundo, a todas luces y también sombras, abandonado por Dios.