Ella llegó buscando su primera chamba... No tenía grandes cualidades institucionales, tampoco sabía comunicarse con mucha facilidad pero se esforzaba, su lenguaje era demasiado confuso y en ocasiones no se le entendía muy bien, modulada de una manera extraña y su velocidad lingüística no iba acorde a lo que su mente quería transmitir.
Amanda era todo un desastre, quizás en la limpieza se le daba bién, en la comida espectacular, en el arte era muy talentosa... Pero hasta ahí llegaban sus fortalezas, su caligrafía era confusa y no poseía un carácter equilibrado, por eso la apodaban "Bi" de Bipolaridad. Sin embargo, y contra todo pronóstico, llegó a la Casa Blanca... Como una Secretaría exclusivamente a disposición de nada más y nada menos que USA, la primera potencia, una de las representaciones más hermosas, divas, adinerada y con un carácter tan Uke, según ella.
Por que sí, ella no sabía que las representaciones realmente existían y que podían ser incluso más sexis que en su imaginación... En especial cuando el precioso Uke se ofreció a dejarla vivir con él, sin saber que ella cómo toda una descarada se tomaría el atrevimiento de revisar toda su casa hasta dar accidentalmente con un pasadizo secreto que daba a una zona exclusivamente para countries... En el que precisamente se reúnen todos los countries.
Si tán sólo Washigton hubiera visto lo mucho que se ríeron ONU, OMS, FBI y CIA al sellar el formulario de la joven... En especial cuando ya habían investigando hasta su tipo sanguíneo.
Una Fojishi, amante del romance BL, el Yaoi, el Boys Love, pero sobretodo, amante de los Countryhumans y los poderes sobrenaturales... ¿Qué podría salír mal...?
Al defender a su familia de un asaltante y morir, Alicia es transmigrada a un mundo del matriarcado, donde las mujeres son el pilar y las que mantienen a la familia, mientras los hombres son los que se quedan en casa.
Lo más sorprendente para Alicia no es el sistema en el que se rige la sociedad, los hombres, que no solo son los que dan a luz, si no, que se dividen en dos.
Los oro, la clase baja que tienen tendencia a dar a luz a otros hombres.
Y los jade, la clase alta que tienen tendencia a dar a luz a mujeres.
No solo eso si no que al ser las mujeres un bajo porcentaje, las familias se conforman por un harem de hombres, los cuales no son vistos más que como máquinas de hacer bebés.
La imagen la saque de internet créditos de la imagen a: "Alya".