"La luz de la luna cubriendo mis plantas, el olor de las tostadas y el café, y el vinilo en marcha reproduciendo músicas de cabarés lentas, mientras un revoltoso hombre a mi lado pinta mis días de vida, como si existiésemos solo para el amor." Un Sanji doméstico y aislado en su casa de campo juega un día al héroe, revolucionando, repentinamente, su calmada y solitaria vida de jubilado.