En la profundidad de una mirada se esconde un universo de verdades silenciosas. Los ojos, fieles mensajeros del alma, revelan sin palabras nuestras emociones más íntimas, desde el desagrado hasta la alegría, desde la ilusión hasta la tristeza, desde la pasión hasta el amor más profundo. Sin embargo, es en el amor donde la mirada se vuelve más expresiva, más transparente.
A través de los ojos se desvela la autenticidad del sentimiento, la conexión única que une a dos almas destinadas a encontrarse. Pero cuando la mirada se posa en otros ojos que no brillan con la misma intensidad, se percibe una verdad irrefutable: no todos los destellos son iguales, no todas las miradas contienen el mismo fuego sagrado.
Las dos vivían en la misma cuidad Los Ángeles, California. Nunca se habían visto hasta que a Lauren le sucede un pequeño accidente en su tobillo lo que causa su primer encuentro de muchos. Dónde la doctora Cabello desde la primera mirada hacia la famosa empresaria no pudo olvidarse de ese guiño inesperado.
Su mente era un caos así que decidió darse un respiro en otro lado.
Lo que ella no sabía que al cambiar de aire haría su vida mejor o traería un poco de drama, humor y sobre todo amor.
Donde el corredor argentino, conocido por su facilidad para chamuyar, cae ante una chica Ferrari
Donde Julieta, sin querer, cae ante el argentino chamuyero