Lo había vuelto a hacer. Había vuelto a caer. Ya no aguantaba más tanto sufrimiento. Tanto dolor. Quería acabar con todo esto...pero qué iba a pasar con mis padres...cómo se quedarían. No podía irme,debía quedarme. Por ellos. Cerré los ojos y lentamente me fui quedando dormida en un sueño profundo. Soy Kate. Una adolescente más de 17 años. Todo el mundo puede pensar que soy una chica normal. Pero si me conocieran verdaderamente,no pensarían eso. Se asustarían y se alejarían. Como hace todo el mundo. Se va. Prometen quedarse;pero cuando más los necesitas. No están.