Una noche luego de llegar de hacer un milagro, Crowley y Aziraphale se dieron la libertad de ir por unos tragos y embriagante hasta el amanecer, solo para liberar la tensión.
Pero esa noche pasó algo que ni ellos mismo saben. Solo recuerda los gemidos, mordidas, el frÃo y calor que sintieron, el movimiento del Bentley, junto con las ventanas empañadas por el frÃo de la noche. Y ahà recordó, La propuesta indecente hecha por el demonio que luego de esa noche le saca mil y un suspiros junto con unas ganas y calentura igual que aquella noche.