"Si quieres seguir viviendo, nunca tienes que cruzar por mi mente".
Kokichi le dijo eso alguna vez, entre tantas cosas extrañas y que parecían no tener sentido, pero cuando Shuichi abrió la boca para hablar, Amami llamó a Ouma, diciéndole que dónde había dejado el control de la sala audiovisual. Nunca pudo preguntar a qué se refería con eso. Lo pensó, lo analizó desde todas las perspectivas, lo escrutó como un acertijo, y nunca pudo deducir si era una amenaza o una promesa. Solo hasta que fue a la habitación de Kokichi para hablar a solas, para hablar sobre si de verdad le mataría...
Kokichi se encontraba a punto de realizar su plan
El plan que conseguiría acabar con aquel juego de matanza que tanto odiaba
Pero algo salió mal, Shuichi Saihara, el detective, evitó que Kokichi se suicidara
Es mi primera vez haciendo este tipo de historias, no me maten :"3